Es la historia de cada verano: los cortes de luz en AMBA. Comenzaron en la noche del miércoles; las zonas más afectadas son Flores, Parque Avellaneda, Mataderos y Villa Crespo. A las 20 del viernes 17 de enero, había casi 60 mil usuarios sin luz entre ambos proveedores de energía de Ciudad de Buenos Aires y el conurbano bonaerense, Edenor y Edesur.
Esto ocurre en medio de la alerta por el calor extremo emitida por el Servicio Meteorológico Nacional (SMN). Y es que, a pesar de haber descendido algunos grados con respecto al jueves, donde la temperatura alcanzó los 40 grados de sensación térmica, aún se mantiene el alto porcentaje de humedad debido a la posibilidad de lluvias y chaparrones previstas para hoy.
Este viernes al mediodía, vecinos cortaron la autopista Dellepiane, a la altura de Lugano, por la falta de luz. También se registraron protestas en Caballito y Mataderos.
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En un comunicado reciente, desde el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires hicieron un llamado urgente a Edesur y al Ente Nacional Regulador de la Electricidad (ENRE) para que tomen medidas inmediatas y restauren el servicio eléctrico de manera eficaz.
La solicitud fue formalizada mediante una carta firmada por Nicolás Zaballa, titular de la Subsecretaría de Inversiones del Ministerio de Desarrollo Económico. En el documento, se dejó en claro que, de no cumplirse con la restauración del servicio, Edesur quedaría «bajo apercibimiento» de enfrentar acciones tanto administrativas como judiciales.
“Es preciso advertir que el servicio eléctrico es esencial para la vida de las personas y su interrupción ocasiona graves perjuicios personales, sanitarios, económicos y patrimoniales, afectando la calidad de vida de vecinos y el funcionamiento de comercios”, aseguraron en el mismo comunicado.
Por otro lado, Edenor también enfrenta cortes en el suministro, aunque en menor escala en comparación con Edesur. En la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, el barrio de Núñez es uno de los más afectados, mientras que en la provincia de Buenos Aires, los distritos de Morón y Moreno son los que concentran la mayor cantidad de usuarios sin servicio eléctrico.
En tanto, la Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico (CAMMESA) informó que la demanda de energía alcanzó los 29.303 MW a las 15 horas de este jueves. Este valor se encuentra a tan solo 349 MW del récord histórico de 29.652 MW registrado el 1° de febrero de 2024. Ante esta situación, el Gobierno volvió a recurrir a la importación de energía desde Brasil, Bolivia y Paraguay para complementar el suministro interno.
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Edesur explicó a través de sus redes sociales las causas del masivo corte de luz que lleva afectando a miles de usuarios desde hace dos días. La distribuidora detalló que el miércoles 15 de enero se registró un principio de incendio en un túnel de cables de media tensión ubicado en la zona de Parque Avellaneda, lo que provocó una interrupción en el suministro eléctrico. Este incidente desató una serie de cortes que, aunque inicialmente fueron localizados, rápidamente se extendieron a varios barrios de la ciudad y la región metropolitana.
La empresa informó que sus equipos técnicos se encuentran trabajando de manera intensiva en las áreas más afectadas, especialmente en los barrios de Villa Lugano y otros cercanos, con el objetivo de resolver los problemas derivados del incendio. En su comunicado, Edesur aseguró que el trabajo es complejo debido a las características del daño en la infraestructura, pero enfatizó que están haciendo todo lo posible para restituir el servicio de manera completa. «Seguimos trabajando hasta restituir la totalidad del servicio», señalaron en su mensaje oficial.
A pesar de los esfuerzos, la situación continúa siendo crítica para los miles de usuarios que siguen sin suministro eléctrico, lo que generó malestar entre los afectados. Desde la tarde del jueves, Edesur no dio detalles sobre el tiempo estimado para la normalización del servicio, pero aseguró que la prioridad es resolver el problema de manera urgente. Mientras tanto, el malestar de los residentes afectados aumenta, ya que la interrupción en el servicio coincide con un período de altas temperaturas que incrementa la demanda energética en la región.
TC / Gi