Si bien Twenty One Pilots ya estuvo tres veces en la Argentina, en aquellas oportunidades fue en el marco del festival Lollapalooza (2016, 2019 y 2023) y siempre deslumbró. Ahora llegó su primera visita a solas, con control absoluto del sonido, las luces y la producción de un estadio cerrado como el Movistar Arena. Y el resultado fue aún más espectacular, con todas sus virtudes potenciadas.
Así, el debut del martes 28 (repite este miércoles 29 en el mismo predio) confirmó todo lo que se había visto en los festivales: una energía desbordante y explosiva, en la línea de grupos poderosos como Red Hot Chili Peppers, un constante movimiento de instrumentos y ubicaciones en el escenario, una parrilla de luces espectacular, lásers y efectos especiales. El dúo provoca una sensación de asombro permanente, con la excitación adictiva de un viaje en montaña rusa.
En cuanto a Tyler Joseph y Josh Dun, lo dieron todo, con una dinámica que los convierte en únicos y originales, siempre sorprendentes. El primero es cantante y multiinstrumentista, capaz de pasar del bajo a la guitarra y los teclados, incluso tocando temas viejos al piano cual Elton John en una tarima en el medio del campo. Puede rapear como Eminem o encarar una canción rockera o un ska digno de No Doubt, como en su hit Ride. Da la imrpesión que lo puede todo.
El segundo es esencialmente baterista, pero también toca algún teclados y canta algunos versos. Su presencia es magnética y logra que la atención se reparta equitativamente entre los dos integrantes del dúo. No es para nada un cantante y un baterista, sino mucho más.
Trucos de magia y sorpresas
Además del constante movimiento escénico sin dejar de propulsar la música apenas complementada por algunas pistas, Tyler y Josh son famosos por acercarse al público y no permanecer estáticos en un escenario.
El cantante no sólo se metió entre la gente durante el primer tema (Overcompensate) parado sobre una tabla, sino que recorrió varias veces el camino vallado hasta el medio del campo, primero para hacer un interludio un poco más intimista y después para sumar en primera voz a un chico del público. Todos tuvieron a la banda más cerca y la gente del campo delantero no podía decidir adónde ubicarse para no perder ningún detalle.
En Car radio, por ejemplo, cantó con capucha y pasamontañas. De pronto no se lo vio más y al instante apareció en lo alto de las gradas del superpullaman, un truquito de magia sencillo pero sorprendente.
La lista de temas de esta Clancy World Tour incluyó gran parte del último álbum y todos los hits de sus
Twenty One Pilots causó conmoción con esta visita a solas, agotando dos fechas y generando un furor que incluyó decenas de fans acampando frente al estadio para entrar primeros. Muchos lucieron un look especial para la ocasión, desde caras cubiertas con pasamontañas, remeras con cintas rojas, camisas blancas con corbatita, y hasta brazos y cuellos pintados de negro.
Todos guiños al vestuario icónico de la banda, visto en fotos y videos, además de los shows. De hecho, Tyler y Josh hicieron numerosos cambios de ropa.
Mención aparte para Balu Brigada, el grupo telonero que cantó una hora antes antes miles de fans que no pararon de cantar todos los temas y ovacionarlos.