Todavía no pudo ganar con Fernando Gago como técnico
Volvió a dejar una imagen deslucida, sobre todo en el segundo tiempo, y el arquero Brey evitó que la diferencia fuera más abultada. Salvio marcó el gol.
Gestos de disgusto de Cavani porque lo sacaron, gestos de disgusto de Gago en cada error defensivo, ampulosos gestos fácilmente imaginables de mucho disgusto de los hinchas de Boca frente a la televisión, por la derrota ante Lanús y más que nada eso por una actuación decepcionante, la más floja desde que asumió Gago.
Lanús, que venía golpeado por la eliminación en la Copa Sudamericana y atravesaba una racha adversa, jugó un muy buen segundo tiempo: provocó algunas grietas en el fondo de Boca y, si hubiera aprovechado todos los errores no forzados del visitante, habría logrado una diferencia mucho más amplia.
En el primer tiempo escasearon las emociones. Solo sacudieron un poco un par de electrizantes gambetas del «Changuito» Zeballos y un remate de Marcelino Moreno, el jugador que más inquietudes provocó en el rival.
La chance más clara en los primeros 45 minutos fue para el equipo visitante. Nació en una gambeta de Zeballos, siguió con un buen pase de Aguirre y el remate de Cavani que encontró muy bien afirmado al arquero local.
Boca se presentó con tres en el fondo y los laterales adelantados, y generó alguna expectativa con esa variante, pero el equipo jugó como casi siempre lo hace cuando va de visitante: mal. Lento para salir jugando, repetido, previsible, sin marca en el medio, entregado en todo el segundo tiempo.
Moreno, Aquino y Salvio (autor del gol) fueron puntos altos en el local, que terminó a puro floreo. Brey fue el mejor de Boca con tres atajadas muy buenas. El miércoles Boca jugará en la Bombonera contra Godoy Cruz, y contra el previsible y lógico disgusto de los hinchas.