sábado, 7 septiembre, 2024
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Se supo la condena para madre e hija que atacaron a una docente en Necochea por reprobar un examen

«Me pegaron patadas en el piso como a un perro y no estaban dispuestos a parar», describió horas después de ser atacada en la puerta de la escuela la profesora de Ciencias Políticas Morotí Arocena (40), en Necochea.

La emboscó la familia de una alumna a la que acaba de reprobar y ahora, seis meses después, se conoció un acuerdo de juicio abreviado que depara penas de seis meses de prisión condicional para la alumna y su madre.

Además, para ambas mujeres regirá una restricción de acercamiento de dos años desde la aprobación del acuerdo, el cual está en manos de la subrogante del Juzgado Correccional N° 1 de Necochea, Luciana Irigoyen Testa.

La Fiscalía, la representante del particular damnificado y la defensoría oficial se reunieron este lunes en una audiencia en el juzgado y presentaron el acuerdo alcanzado.

Acordaron un trámite de juicio abreviado y una pena de seis meses de prisión condicional para madre e hija –alumna de 5° año-, acusadas de lesionar a patadas y trompadas a la docente de la materia de Derecho -dicta ciencias Políticas- de la Escuela Secundaria N° 7 (es comercial), ubicada en avenida 58 y calle 55, de Necochea.

La Escuela Secundaria N° 7, de Necochea, donde fue agredida la profesora Morotí Arocena. Foto Gabriel Bulacio.La Escuela Secundaria N° 7, de Necochea, donde fue agredida la profesora Morotí Arocena. Foto Gabriel Bulacio.Oportunamente, Arocena había denunciado la participación del hermano de la estudiante, quien la esperó en el pasillo de la escuela y le increpó por haberla reprobado.

El ataque ocurrió el 15 de marzo pasado. Dos días después, cuando se supo de la agresión, hubo una manifestación frente a la escuela, sobre la avenida 58 frente al Paseo de la Memoria.

Luego se hizo una marcha: siete cuadras ocuparon los manifestantes, entre ellos docentes, estudiantes, integrantes de los gremios docentes y de escuelas privadas. Esa mañana no hubo clases en los jardines municipales.

«Forra, hija de puta, de todo decían. Me los sacan de encima, porque no paraban de pegar, para ellos era todo o nada», le contó la docente a Clarín en una entrevista publicada en abril pasado.

EMJ

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