Cuando se descontaba que en el paquete económico que lanza el gobierno por estos días estaba una nueva entrega del Ingreso Familiar de Emergencia de 15.000 pesos, el ministro de Trabajo de la Nación Claudio Moroni salió a ponerle paños fríos a la versión.
En una conferencia de prensa convocada para hablar de la suba del piso de Ganancias a 175.000 pesos y del reciente aumento del Salario Mínimo Vital y Móvil, que llegará a 33.000 pesos en febrero del 2022, el ministro se despachó con que “el IFE fue una medida extraordinaria para una situación extraordinaria que no es la actual. Lo mismo con el ATP. Se están analizando ayudas focales para sectores afectados. Hoy estamos asistiendo a más de 400 mil trabajadores y casi 80 mil monotributistas vinculados a actividades críticas. Puede haber otras medidas, están en estudio y se irán anunciando a medida que vayan saliendo”.
Moroni se refirió también a las críticas que consideran a los anuncios económicos, electoralistas: “Electoralista no, porque nosotros ya habíamos previsto la revisión del salario mínimo en septiembre, ya estaba previsto desde marzo”, apuntó.