La expedición de 11 franceses y un argentino que se propone volver a encender el mítico “Faro del Fin del Mundo” en Isla de los Estados zarpó esta madrugada desde Ushuaia, luego de que el inicio del viaje se demorara 24 horas por razones climáticas, informaron fuentes oficiales vinculadas al grupo de aventureros.
La misión, liderada por André Bronner, de 62 años, el mismo francés que en 1998 reconstruyó completo el faro inspirador de la famosa novela del escritor Julio Verne, partió de un muelle náutico de la capital fueguina a bordo del velero “Peau de orange” pasadas las 5 de hoy, precisaron las fuentes a Télam.
El nuevo sistema está basado en luces led y menor consumo de energía solar, que tiene un costo de 12.000 euros y fue financiado con aportes públicos y privados del país europeo. Además los franceses construirán una pared contigua al faro, de 3 metros de largo por 1,5 de altura, a la que llamarán “memorial”, para que los viajeros dejen allí sus mensajes o placas conmemorativas.
La expedición iba a partir el domingo, pero el análisis de las condiciones climáticas en la zona, de difícil navegación y caracterizada por un sinnúmero de naufragios, llevó a que Bronner y su equipo decidieran posponer un día el inicio de la travesía. El grupo de nueve expedicionarios y tres tripulantes abordó el velero ayer a las 20 “para cenar y esperar mejores condiciones de navegabilidad”, luego de que Ushuaia atravesara una jornada de intensas lluvias y escasa visibilidad.