Hilario Navarro tiene el orgullo de decir que jugó en tres de los cinco grandes del fútbol argentino (Racing, Independiente y San Lorenzo) y, por motivos económicos y otras incidencias, por poco su llegada a Boca y River no llegó a buen puerto.
Resistencia es el décimo equipo de su carrera (@ResiSportClub).
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Hoy, su realidad recorre otro sendero. El ex arquero de Estudiantes firmó contrato con Resistencia Sport Club de Paraguay, y disputará la división Intermedia en el país guaraní, donde jugó su último partido en 2007.
El arquero deberá custodiar los tres palos de Resistencia, la institución que tomó trascendencia por tener un árbol en medio de su tribuna y ser socio desde el 2017, luego de que sea considerado como “un símbolo y promueva el espíritu ambientalista”.
En la Argentina desempeñó su carrera desde 2007 cuando Racing lo compró tras una disputa con River. Aquella situación tuvo la particularidad de que Navarro fue a entrenar sin contrato al club de Ñunez, hasta que la AFA le exigió formalizar por el club de Avellaneda.
Luego de su paso por Guaraní y Cerro Porteño, Hilario Navarro dejó Boca Unidos y vuelve al fútbol paraguayo con la esperanza de lograr el ascenso con uno de los clubes más humildes.
