Se han quedado solos, Messi y el Barcelona, en la defensa del honor de la Liga española ante su majestad la Champions League.
Está en riesgo la contundente supremacía que impusieron Real Madrid (campeón en cuatro de las últimas cinco ediciones: 2014, 2016, 2017 y 2018) y Barça (ganador en 2015). Además de los títulos, esa hegemonía quedó plasmada en otro dato: en las seis Champions anteriores la Liga clasificó invariablemente a tres equipos en los cuartos de final.
Pero se rompió este año. El golpe más duro fue la eliminación del Real Madrid en manos del Ajax, aunque también dolió la salida del Atlético de Madrid empujado por la Juventus. En contrapartida, y quizás como un mensaje a futuro, la Premier League invadió con sus cuatro equipos participantes. Todos están entre los ocho mejores: Manchester City, Manchester United, Tottenham y Liverpool. Para reforzar la tendencia, también avanzaron a esa instancia Chelsea y Arsenal en la Europa League.
Con los cruces definidos ayer en Nyon, Suiza, Inglaterra se aseguró al menos un semifinalista: El City de Pep Guardiola o el Tottenham de Mauricio Pochettino. El otro Manchester será el rival del Barcelona, que está obsesionado por volver a levantar La Orejona y por borrar de la memoria la insólita eliminación del año pasado ante la Roma, cuando perdió 3-0 después de haber ganado 4-1 el partido de ida.
Lo que sí quiere recordar el Barça son los antecedentes con el United. Son las finales de 2009 y 2011, ambas ganadas por el histórico equipo de Guardiola ante el de Alex Ferguson. En la primera, jugada en Roma, fue 2-0 con goles de Samuel Eto’o y Lionel Messi. En el subcampeón jugó un tal Cristiano Ronaldo y también ingresó Carlos Tevez. La segunda definición tuvo como escenografía el mítico Wembley de Londres y terminó 3-1. Pedro, Messi y David Villa marcaron para los campeones y Wayne Rooney achicó la diferencia.
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Hay también en este choque de gigantes un recuerdo para el actual técnico del Manchester que viste de rojo. El noruego Ole Gunnar Solskjaer volverá al Camp Nou veinte años después de su partido soñado: el 26 de mayo de 1999, en la final ante Bayern Munich, el delantero ingresó en el minuto 81, cuando el Manchester perdía 1-0. En el 90+1, lo empató Teddy Sheringham. Y en 90+3, Solskjaer convirtió el gol que valió una Copa. Agónico e inolvidable.
Desde que reemplazó en diciembre a José Mourinho en el banco, el equipo jugó 18 partidos, ganó 14, empató dos y perdió dos. En octavos de final dejó afuera al Paris Saint-Germain (con un 3-1 de visitante, tras perder 2-0 como local) ahora va por el Barcelona. Sergio Romero y Marcos Rojo están en el plantel, pero no suelen sumar muchos minutos.
Primero jugarán en Old Trafford, el miércoles 10 de abril; luego en el Camp Nou, el martes 16.
El ganador de esta llave se enfrentará con el vencedor entre Liverpool y Porto, que abrirán en la tierra de Los Beatles (9/4) y completarán en Portugal (17/4). Es un choque sin argentinos.
Más allá de españoles e ingleses hay un protagonista que está decidido a hacer todo el ruido posible. Más del que ya hizo. Cristiano Ronaldo se mudó a Juventus y después de su noche de película, con los tres goles ante Atlético de Madrid, avisó: “Para esto me trajeron”. Es así, la Juve, aburrida de ganar el campeonato italiano sin resistencia (con 18 puntos sobre el segundo va rumbo a su octavo título consecutivo) le apuesta a la Champions. En cuartos chocará con el Ajax de Nicolás Tagliafico, que maravilló al planeta con su 4-1 sobre Real Madrid.
Juventus y Ajax protagonizaron dos finales de esta Copa: en 1973 ganaron 1-0 los holandeses; en 1996 los italianos, 4-2 en definición por penales tras el 1-1. Primero se encontrarán en Amsterdam (10/4) y luego en Turín (16/4).
El que avance tendrá a un inglés como rival. Tanto Tottenham como Manchester City son los únicos de este grupo de los ocho que nunca ganaron la Champions. El Kun Agüero lidera con sus goles las aspiraciones de los Citizens, que tienen además a un Pep Guardiola ansioso por conseguir lo que pudo con el Barcelona (dos veces) pero no con el Bayern Munich.
Las semifinales se jugarán los lunes 29 de abril y 6 de mayo. La final, el sábado 1° de junio en el estadio Wanda Metropolitano de Madrid. Sólo allí, en el último partido, se podría dar el choque de los planetas del gol: Lionel Messi y Cristiano Ronaldo.
