Elisa Carrió aprovechó una ausencia de los jueces Carlos Rosenkrantz y Ricardo Lorenzetti en el inicio de la Asamblea Legislativa para tender puentes con Elena Highton de Nolasco, Juan Carlos Maqueda y Horacio Rosatti.
La diputada se acercó al sector donde estaban los jueces y apostó a que todo alrededor escucharan el diálogo. Con tono elevado, casi a los gritos, Carrió saludó a los tres ministros que ya estaban sentados esperando al Presidente.
Carrió habló sin cuidados, todos los que estaban en esa zona escucharon el diálogo. Primero se dirigió a Maqueda: “hay un Maqueda radical. ¿Ese es tu sobrino?”, le preguntó.
Sin esperar la respuesta saludó cariñosamente a Highton y de inmediato giró y le extendió la mano a Rosatti. La líder de la Coalición Cívica le dijo en tono fuerte: “sabés que yo te respeto como siempre” y le guiñó un ojo y agregó: “Cada día estás más buen mozo”, lo lisonjeó.
El comentario y el gesto de Carrió le sacó una sonrisa a alguien que justamente no se caracteriza por sus sonrisas.
Carrió había manifestado su malestar con Rosatti por su entendimiento con Lorenzetti, luego que Rosenkrantz se alineará de manera abierta con la Casa Rosada. Pero en rigor, la alianza más sólida del santafesino es con Maqueda, ambos provienen del peronismo del interior y fueron convencionales constituyentes, como la propia Carrió.
Rosatti votó a favor de Rosenkrantz en la presidencia de la Corte, pero luego trabó un entendimiento con Lorenzetti. Ahí es donde chocó con Carrió quien aseguró estar “decepcionada” con Rosatti a quien en su oportunidad impulsó para llegar al Tribunal supremo.
Los dichos de la diputada llegaron luego de una acordada sin precedentes en la Corte Suprema, en la que los jueces Lorenzetti, Rosatti y Maqueda votaron una modificación en el manejo de la burocracia del tribunal, recortando el poder de Rosenkrantz.
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